AMENAZAS Y TERRORISMO.

AMENAZAS Y TERRORISMO.
Son dos conductas ilícitas que atentan contra la seguridad pública y que tienen mucho en común. Con la amenaza y el terrorismo se tiene como propósito causar alarma, zozobra o terror en la población o en un sector de ella. En la amenaza, se hace intimidando a personas, familia, comunidad o institución, y el terrorismo mediante actos que pongan en peligro la vida, la integridad física o la libertad de las personas; ocasionando daños y perjuicios.
En el caso de la amenaza, el que por cualquier medio apto para difundir el pensamiento atemorice o amenace a una persona, familia, comunidad o institución, con el propósito de causar alarma, sosobra o terror en la población o en un sector de ella, se ejecuta mediante llamada telefónica, cinta magnetofónica, videocasete o escrito anónimo lo cual hace pensar que lo que comienza como amenaza puede llegar a materializarse.
1- Carro bomba.
Vehículos cargados con material explosivo. Esta modalidad tiene como objetivo causar daño e impacto entre la población civil, bienes particulares y del Estado; generalmente va acompañado de un elemento de distracción (señuelo) para atraer la mayor cantidad de gente.
2- Bombas o minas anti-persona.
Son cargas de mediano poder explosivo, utilizadas por los grupos al margen de la ley por lo general ubicadas en bolsas de basura, canecas, maletas u objetos que pasan inadvertidos o son arrojados desde vehículos o motos en movimiento; esta modalidad es utilizada en la mayoría de los casos contra instalaciones gubernamentales, residencias de funcionarios públicos o sedes políticas.
3- Paquete bomba.
Utilizado para afectar a una persona determinada, consiste en ubicar una pequeña carga explosiva en un regalo, carta o libro que es enviado generalmente por correo o dejado en las porterías de oficinas y viviendas. Su remitente es desconocido y se activa por liberación de presión muy sensible a la manipulación.